No quisiera revelar toda la trama pero una de las cosas que más me gustaron de este dorama es que, contrario a lo que les había comentado en este post, las parejas no se mantuvieron, sino que cambiaron, pero lo más importante de esto no es que haya sucedido sino la forma en la que pasó, así que no me siento culpable por decirlo 🙂
Absolutamente todos los personajes evolucionaron a la par de los protagonistas principales, no solo a nivel laboral sino también a nivel personal. Esto me gustó, porque hacerlo le dio más matices a la historia.
Me encantó Park Shi Hoo (Koo Yong Shik) a quien solo lo había visto en «Confesiones de un asesino» (que by the way vi en coreano – solo la han dado en ese idioma en cable – por el simple placer de escucharlo a él y a s) y también Im Ji Kyu (Kang Woo) a quien vimos en «El más grandioso amor» (¡¡¡ QUE ACTUALMENTE ESTÁN REPITIENDO EN SERTV !!!). Cabe destacar que el papel de este último en «El más grandioso amor» es el mismo que en «La reina de los reveses», es decir, hace de asistente del protagonista, sin embargo, no solo parece más joven (siendo que EMGA es un año más antigua) sino que los personajes son diferentes entre sí, siendo en «La Reina de los reveses» más «adulto» (Ah… su edad para cuando se filmaron estos doramas era de 32 y 33 años respectivamente… solo como dato curioso). ¿Qué les digo?. Los bromance le dan vida a los doramas.