CINE RETRO. Troya. Brad Pitt, Eric Bana, Orlando Bloom.

Ayer vi Troya de nuevo y no me puedo explicar cómo es que hasta ahora no la había posteado dentro de las recomendaciones de Cine Retro: ¡Inconcebible!.

Troya es una de mis películas favoritas. Increíblemente, no conozco la historia a nivel literario o histórico, pero digamos que es uno de los errores que estoy tratando de subsanar incluyendo en mi haber libros «imperdibles» de la literatura universal (va un poco lento el asunto porque, qué puedo decir, es un gran universo el que hay que explorar, ¿no?), sin embargo, la historia que en el 2004 nos fue contada por Brad Pitt, como «El valiente Aquiles», Eric Bana como Héctor, «El príncipe domador de caballos y Orlando Bloom, Paris, es sencillamente espectacular.

El Rey Agamenón está a la búsqueda de nuevos territorios para conquistar y va bien en su empresa ya que cuenta con el apoyo del más grande de los guerreros: Aquiles. Uno de sus objetivos más codiciados es Troya, pero es un asunto delicado pues posee una gran muralla y un príncipe bien adiestrado en las artes de la guerra que la protege, por lo que Príamo prefiere llevárselas bien con ellos. No obstante, Paris, el príncipe más joven del reino Troyano, conocido por sus andanzas amorosas, seduce a Helena, Reina de Esparta (o viceversa) y deciden escapar sin decir nada a nadie. Héctor se da cuenta a medio camino y decide regresar, pero Paris le convence de que «ésta vez» su amor es verdadero, decide entonces apoyar a su hermano menor y acepta llegar a Troya para pedir consejo a su padre, pero este desoye sus palabras y con ésto aceptan una segura confrontación con el Rey Menelao, hermano de Agamenón.

 

 

Menelao exige a su hermano que lo ayude a salvar su honor y éste lo hace encantado, ya que le da la excusa perfecta para invadir Troya haciendo mano del orgullo de toda Grecia. Convoca a Aquiles, quien no siente el más mínimo respeto por él, a través del Rey de Itaca, Odiseo, a quien Aquiles si respeta y éste lo convence argumentando que no habrá mejor ocasión para alcanzar la inmortalidad, que yendo y venciendo al poderoso ejército Troyano.

Ya en Troya, Paris ofrece a Menelao un duelo, con más valentía de la que poseía y pide que, de ganar, los griegos abandonen Troya y haya paz, pero es un completo inútil en cualquier asunto que no fueran los amorosos y fácilmente es derrotado por Menelao, lo que lo hace huir despavorido y lanzarse a los pies de Héctor, quien para salvarlo, mata a Menelao, quien por supuesto no se esperaba ese ataque a traición de parte de un Príncipe «respetable» como parecía ser Héctor. Obviamente se rompe el pacto que había llevado al duelo y se inicia la guerra.

Aquiles, quien ya había demostrado su poderío al arribar a las playas troyanas venciendo fácilmente a la primera resistencia del reino con sus mirmidores, decide no inmiscuirse más en el avance de las tropas griegas y consecuentemente, casi decantando el resultado a favor de Troya, por una nueva discusión con Príamo, esta vez, por una Troyana: Briseyda, una virgen del templo de apolo, sobrina del Rey de Troya, quien es capturada por el ejército griego.

Luego de varios días con ella, decide partir, en paz y completamente enamorado, pero su primo Patroclo, lo acusa de abandonar a sus hermanos y decide ir a la batalla vistiendo su armadura. Al ser confundido con Aquiles, el ánimo del ejército griego sube como espuma y empiezan a avanzar liderados por el chico, quien había sido entrenado personalmente por Aquiles, lo cual hacía que incluso sus movimientos fueran parecidos a los de éste. Patroclo no sólo engañó a sus hombres, sino a Héctor, quien le buscó para matarlo a sabiendas del gran guerrero que era (Aquiles). Lo hiere de muerte y es hasta entonces que se da cuenta de que no era quien pensaba…

Aquiles, quien amaba a Patroclo, se enceguece de odio y va en busca de Héctor. Lo mata y no le concede el privilegio de un funeral digno.

 

Es entonces que Príamo, introduciéndose sigilosamente en su tienda, le pide de rodillas que le permita llevarse a su hijo y… «decir las oraciones, poner las monedas para el barquero…», etc. Ese día, Príamo se lleva también a Briseyda…

… «Yo amé a mi muchacho desde el momento en que abrió los ojos,
hasta el momento en que tú se los cerraste» …

«Hasta los enemigos se tienen mucho respeto».

Más tarde, Odiseo ingenia una forma para atacar… el legendario caballo de Troya… y el Reino «arde» por la incompetencia y fanatismo de su Rey, quien nuevamente desoye los consejos de su hijo (esta vez de Paris), quien le aconsejó que quemara el caballo que supuestamente habían dejado los griegos como ofrenda a Poseidón para que los dejara marchar, luego de haber caído con la peste, como venganza del Dios Apolo por haber saqueado su templo. Aquiles decide ir en busca de Briceyda para ponerla a salvo y cuando por fin la encuentra, Paris lo asesina con cuatro flechazos desde lejos.

Sí, la sinopsis es extensa, pero créanme, no cubre el total por ver o saber de la historia que cuenta esta película. Se describen tantos errores políticos, tantos errores de estrategia bajo el marco de esta cruenta batalla en nombre del «amor», que ya verán que ésto no es nada. 😀

¡Simplemente no pueden dejar de verla!.

Fuente: Wikipedia